JUDO OFRECE UN ESCENARIO DEPORTIVO SIN DISTINCIONES

 El patio de un colegio está constituido de campos deportivos donde los niños cubren la mayor parte del terreno. Los equipos competitivos segregan los entrenamientos por categorías y genero liquidando la oportunidad de compartir experiencias. Las celebraciones de partidos por categorías germinan una distribución deportiva, donde las primeras emociones de triunfo, o derrota, se graban con los del mismo sexo.

La práctica de judo no sólo elimina los obstáculos y permite entrenar con tus hermanos y amigas, también relaciona distintas edades, sin la necesidad de determinar la práctica deportiva a tus condiciones físicas. En el judo es posible arrastrarse y revolcarse con naturalidad con todos los de tu pandilla, rompe los limites posturales y rebasar las barreras comportamentales con los juegos de unión.

Hoy en día, el contacto y la comunicación son necesidades que se diluyen con la era tecnológica, en este sentido gana importancia los escenarios donde se proyectan estos valores, convirtiéndose en tesoros para la educación.

Es más, las actividades físicas consideradas socialmente como las más adecuados centran la construcción de sus programas en la excelencia de la actividad, olvidando el bienestar y dividen a la infancia por edades y sexos, orientadas por las condiciones físicas para adecuarse a los futuros éxitos infantiles. Y, más tarde quieren que se normalice.

Los objetivos inflexibles pueden fulminar los momentos más emocionantes, que se viven en los primeros años de actividad física. Esta circunstancia a largo plazo, proyecta un modelo deportivo en la edad madura relacionado con el gozo de asistir al estadio de tu club con tus colegas de equipo para celebrar unidos.

El judo abre las puertas de sus clases sin distinción, convirtiéndose en un espacio de libre acogida. No es complicado: dejar libre el recreo deportivo. Dejen a los niños con las niñas, dejen que compartan sus frustraciones, avances y logros, con el fin de estimular sus posibilidades para eliminar miedos y aquellos prejuicios que resuenan en la sociedad con etiquetas.

Normalizar las relaciones entre edades y sin distinción de género, mezclar sus designios, anhelos, cualidades y demás… enriquece el entrenamiento de judo, sin la necesidad de más motivos que el de pasar un buen rato en compañía.

Texto ©️Almudena López Blog: www.judobywoman.com

Foto ©️Gonzalo Pérez #judolimpio #joshijudo #judo #judoka #judoca #Judokas #mujerydeporte #Joshitai #judojoshi

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información. ACEPTAR

Aviso de cookies