No hay nada mejor que rodearse de mujeres inspiradoras que bailan conscientes entre posibilidades y dificultades con aplomo y mesura.
Porque, contraponer la supremacía con la educación requiere un acto generoso de humildad que componga espacios fértiles de convivencia cómo centro esencial del judo.
Cuesta explicar con palabras lo potente que se siente al reunir y cocer JUDO A TRES FUEGOS. Con tres almas que planean en sintonías discordes, con tres secuencias vivas, con tres mundologías virtuosas y tres crecimientos libres que caminan al compás de la misma esencia.
JUDO A TRES FUEGOS. Con tres almas que planean en sintonías discordes, con tres secuencias vivas, con tres mundologías virtuosas y tres crecimientos libres que caminan al compás de la misma esencia.
En un sentido, la maestra IVANA GAIO, viuda del maestro Cesare Barioli. Su compromiso carga, con mucha sabiduría en la actividad física y el judo, y con las propuestas educativas que ambos iniciaron hace varias décadas con AISE. Ella ama el deporte, y con esto se ha propuesto destacar un alma pura educativa con su dulzura, dolor y seguridad para empujar proyectos de mejora en el desarrollo personal.
En otro, la presidenta Cinzia Cavazzuti gobierna el judo en la región de Lombardia. Cinzia está formada a base del esfuerzo extremo desde la competición, y como judoka incansable sin limites laborales, pisa fuerte convencida de que el camino está en la co – creación de nuevos espacios fértiles que mejoren el judo en todos sus ángulos.
Y en medio, Judobywoman con la curiosidad incansable, pasión creciente y muchas ganas de aprender y preguntar, con el fin de relacionar datos que ofrezcan nuevos rendimientos positivos.
No hay mayor riqueza que unirse a la excelencia, incluso pensando de distinta manera surge y crece el encanto, como algo mágico que aparece abriendo la mente, para… componer, descomponer, y volver a componer, y con ello, aumentar el sentido eficaz de la energía y el valor del judo.
Después de todo, el trabajo en equipo genera un compromiso firme que multiplica y propaga los resultados.
Y, con este contexto, sale a la luz aquello que dijo el maestro Kano “si quieren saber qué es judo, hagan el favor de mirar a las mujeres”.
TEXTO: Almudena López
